miércoles, 3 de marzo de 2010

Cosas que NO para Juan y Dani

- La gente que no responde a tus "buen día".
- Cabildo y Juramento en auto.
- El olor a supermercado.
- Los caretas.
- La vuelta de los recitales.
- La gente que al hacer una fila no se para atrás tuyo sino al lado.
- Bañarse y volver a ponerse ropa sucia.
- Pisar agua con las medias.
- Dejar números en el visor del microondas.
- El despertador cuando estás durmiendo acompañado.

domingo, 3 de enero de 2010

Subterranean Homesick Alien


I always wanted to think that I was some alien. I used to think when I was young that I was adopted by my mother because they found me and a spaceship let me off. I was from a different planet. I wanted to be from a different planet really bad. Every night I used to talk to my real parents and my real family in the skies.
I knew that there were thousands of other alien babies dropped off... and they're all over the place and I've met quite a few of them. It's just something that I would always like to toy with in my mind, it was really fun to pretend that, you know. There's a special reason for me to be here and... I feel really homesick all the time. So do the other aliens. And I only have the chance to come across to like a handful of other aliens throughout the rest of my life... Eventually one day we'll find out what we're supposed to do.



Kurt Cobain

miércoles, 23 de diciembre de 2009

Arturo Belano


Laura Jáuregui, Tlalpan, México DF, enero de 1976. De todas formas siempre estaba más o menos al tanto de lo que hacía Arturo, y yo pensaba: pero qué imbecilidades se le pasan por la cabeza a este tipo, cómo puede creerse esas tonterías, de pronto, una noche en que no podía dormir, se me ocurrió que todo era un mensaje para mí. Era una manera de decirme no me dejes, mira lo que soy capaz de hacer, quédate conmigo. Y entonces comprendí que en el fondo de su ser este tipo era un canalla. Porque una cosa es engañarse a sí mismo y otra muy distinta es engañar a los demás. Todo el realismo visceral era una carta de amor, el pavoneo demencial de un pájaro idiota a la luz de la luna, algo bastante vulgar y sin importancia.
Pero lo que quería decir era otra cosa.

Simone Darrieux, rue des Petites Écuries, Paris, septiembre de 1977. Y hacía algo todavía más chocante que escribir en los márgenes. Probablemente no me lo crean, pero se duchaba con un libro. Lo juro. Leía en la ducha. ¿Que cómo lo sé? Es muy fácil. Casi todos sus libros estaban mojados. Al principio yo pensaba que era por la lluvia, Ulises era un andariego, raras veces tomaba el metro, recorría París de una punta a la otra caminando y cuando llovía se mojaba entero porque no se detenía nunca a esperar a que escampara. Así que sus libros, al menos los que él más leía, estaban siempre un poco doblados, como acartonados y yo pensaba que era por la lluvia. Pero un día me fijé que entraba al baño con un libro seco y que al salir el libro estaba mojado. Ese día mi curiosidad fue más fuerte que mi discreción. Me acerqué a él y le arrebaté el libro. No sólo las tapas estaban mojadas, algunas hojas también, y las anotaciones en el margen, con la tinta desleída por el agua, algunas tal vez escritas bajo el agua, entonces le dije por Dios, no me lo puedo creer, ¡lees en la ducha!, ¿te has vuelto loco?, y él dijo que no lo podía evitar, que además sólo leía poesía, no entendí el motivo por el que él precisaba que sólo leía poesía, no lo entendí en aquel momento, ahora sí lo entiendo, quería decir que sólo leía una o dos o tres páginas, no un libro entero, y entonces yo me puse a reir, me tiré en el sofá y me retorcí de la risa, y él también se puso a reir, nos reímos los dos durante mucho rato, ya no recuerdo cuánto.

Xosé Lendoiro, Terme di Traiano, Roma, octubre de 1992. Hasta aquí llega la poesía, esa mala pécora que me ha acompañado a traición durante tantos años. Olet luceram. Ahora sería conveniente contar dos o tres chistes, pero sólo se me ocurre uno, así, de pronto, sólo uno, y para mayor inri de gallegos. No sé si ustedes lo saben. Va una persona y se pone a caminar por un bosque. Yo mismo, por ejemplo, estoy caminando por un bosque, como el Parco di Traiano o como las Terme di Traiano, pero a lo bestia y sin tanta deforestación. Y va esa persona, voy yo caminando por el bosque y me encuentro a quinientos mil gallegos que van caminando y llorando. Y entonces yo me detengo (gigante gentil, gigante curioso por última vez) y les pregunto por qué lloran. Y uno de los gallegos se detiene y me dice: porque estamos solos y nos hemos perdido.


Roberto Bolaño - Los detectives salvajes.

sábado, 28 de noviembre de 2009

Es tan oscuro, tan en silencio el proceso a que me obligo.

Tengo que empezar a ser más vano para empezar a ser más feliz.

domingo, 15 de noviembre de 2009

By the gate there's a young man watching the snow fall

Hoy me vi solo de nuevo.

Había una calle vieja de Londres gris recortando el cielo y una reja y una bicicleta.

Y en el fondo yo y los peldaños de cemento.

El universo gira en espiral (y sus estrellas brillan más o menos acorde a cómo les da la luz desde mi punto de vista), y yo estoy sentado en mis peldaños grises de este paisaje que aunque me rodea me es ajeno.

No se aleja caminando una mujer por el medio de la calle desierta, acrecentando el infinito repetir de las líneas en blanco.

Me rodea un mundo tan solo como yo, tan carente de vida como yo.

Quizás mañana llegue una presencia que estalle todo en colores.

Hoy, todo es inerte e incierto.

La bicicleta sugiere bosques de árboles y de olores y de luz que rompe suave, que corona hasta la eternidad.

Pero esos paisajes sólo se multiplican en mi mente y aunque nada me impide levantarme todo sigue inerte.

Si existiera el contacto, todo sería menos puro.

Sin embargo, no puedo calmar el palpitar en las yemas de los dedos, el tifón que desde lo más profundo de lo salvaje esboza el contorno de una presencia que desgarra la calma con ecos del clamor ahogado de mi nombre.

Ahora empieza a nevar, pero no necesito probar para saber que la puerta que duerme a mis espaldas está desde siempre cerrada.

19-10-09

martes, 3 de noviembre de 2009

Everything is broken

there is a loneliness in this world so great
that you can see it in the slow movement of
the hands of a clock

The Crunch, Charles Bukowski.

lunes, 7 de septiembre de 2009

Romeo banished

¿Cómo pensarte
evitando que te veas
cristálida contra el mar,
rota en luz ante el fuego en la noche,
escrita de una pluma roja
en el libro de mi alma?

El pájaro muerto
ya no puede construir
un nido donde acurrucarse
la noche de la tormenta
de tu recuerdo.

Ahora sólo sueño durmiendo
sobre su tumba
la tumba de lo que fuimos
la tumba que cavó tu última sonrisa
soñada en esta tierra que tiembla.

Me levanto y no tengo destino
pero aún así
creo poder completar, en silencio
esta tragedia hecha de viento.

Pensarte es todo lo que tengo
y es todo lo que soy.

Pensarte
Pero cómo, si yo, pájaro muerto
cómo, si yo, sangrando mis plumas,
hojas doradas en este otoño de gritos ahogados.